La miel de primavera natural y saludable se produce en el período desde el mayo hasta el junio. En este tiempo florecen muchas flores y plantas cuyo néctar recogen las abejas para la producción de este tipo de miel. Tales plantas son acacia, cerezo aliso, manzano, así como muchas otras que crecen en esta o aquella región durante el período de recolección. Por lo tanto, la miel de primavera es una combinación de néctares obtenidos de diferentes cultivos, lo que hace que su sabor sea especialmente atractivo.
La miel de primavera natural fresca sin suplementos artificiales es una sustancia líquida de color amarillento. Además, debe ser muy dulce y un poco amarga. Esta miel natural y saludable se pone más valiosa después de seis meses de su producción. Dicha miel obtiene la combinación de sabores verdaderamente única, que le encantará a cualquier experto de alimentos de granja naturales.
La peculiaridad de la miel de primavera es que no puede permanecer en el almíbar durante mucho tiempo, se cristaliza rápidamente. Por esta razón, al comprar este producto, por ejemplo, en otoño, debe prestar atención a su consistencia, ya que si es líquido, probablemente no es un producto natural, sino dañino y peligroso.
La velocidad alta de la cristalización de este tipo de miel se explica sencillamente: en primavera las abejas no están bastante activas, como otros insectos y animales, por eso no purifican el polen recogido bien. La miel posee un gran poder antibiótico y cicatrizante, por lo que ha sido utilizada desde tiempos remotos en el tratamiento de heridas, quemaduras, úlceras, etc.
La miel de primavera natural fresca contiene más de 250 vitaminas y microelementos, extremadamente necesarios para el funcionamiento correcto del cuerpo humano. La variedad de sustancias beneficiosas tan grande se explica de manera muy simple: las abejas recogen el polen de plantas numerosas.
